Poesia: Poeta busca Musa

Poeta busca Musa

Escribo por muchos motivos.
Escribo para entrar hondo en mis vacíos rellenos y oscuros
para sacar con cuchara de tinta los destellos de luz
que me dan la vida.
Escribo porque no siempre estoy acompañado
de la Señora Felicidad
y es un acto de rebeldía reventar con poesía
y energía los pozos de la soledad.

Estoy inmerso en palabras para entender
porque Buda dijo que el dolor es parte irrenunciable
de nuestra existencia.
Y ahora,
así nació,
deseo sentir aparecer esa Musa que flota sola
sin su corazón de poeta.

¿Eres ninfa hambrienta de lo inexplorado
y distancias saludables?
Entonces en mi brazo encuentras el apoyo
para afrontar con garantías los viajes extra-solares.
Si tus amores visitantes pasados y presentes te han dejado
a la derriba y sin rumbo a donde dirigir tus cariños diarios,
échame las redes de tu mirada cansada
y saciare tu sed a vivir de nuevo
con humor y complicidad de libre pensador y seductor.

Da igual si solo somos de agua, sueños y huesos.
Más de una vez conseguiremos saltarnos la barrera
del aburrimiento cotidiano.
Si tus besos a distancia son para mí como bombas incendiarias
que producen mis versos de fuego sobre pantallas y papeles,
imagínate la locura común que nos llevaría a mojar juntos
nuestros cuerpos en lagos veraniegos o mares otoñales.

No te pido que renuncies a tu libertad humana “Amor Creciente”.
No quiero que dejes de crecer como las margaritas en el balcón de tu casa.
Suelta los pétalos y deja entrar “Pasión Si” y “Cosquilleo también”.
Por lo que dirán, ni te molestes, ni te lamentes.
No podrán ver, ni oler, ni preveer, ni imaginar lo más mínimo de lo lejos
que puedes volar.
La niña desnuda de camisón transparente de antaño no te ha abandonado
y todavía puedes sonrojearte al escuchar mis palabras de aprecio y apoyo
que siempre te estoy desvelando.

El Poeta y su Musa,
las coincidencias de la vida media vacía y de los recuerdos a rellenar
lo hacen posible.
No te espero, sé que vendrás al sentir mi presencia.

Avaherz